Los presupuestos generales de España han sido aprobados y pueden ser uno de los más austeros de la historia debido a la complicada coyuntura económico del país. En primer lugar la deuda del estado se prevé que legará al 100% del PIB en breve quedando todo el país comprometido y endeudado.
En segundo lugar se establece una congelación de los gastos de la casa real y del suelo de Mariano Rajoy, Presidente del gobierno, así como una bajada del 15% en el gasto por prestaciones por desempleo siendo la única buena noticia la revalorización de un 0,25% las prestaciones por jubilación.